Es una enfermedad crónica, que se caracteriza por enrojecer la parte central de la cara, que incluye frente, pómulos, parte de la nariz y mentón.  Dependiendo de los estados tensionales a que esté sometido el paciente, esta enfermedad puede disminuir o aumentar la tonalidad del enrojecimiento.   Cuando la rosácea no se trata, puede originar engrosamiento de la piel, aparentar acné, costras, ardor, sensación de quemadas y picazón.  En los casos severos, puede engrosar la nariz.   Se da principalmente en mujeres de piel blanca mayores de 40 años.   La causa se desconoce, pero siempre hay una hinchazón de los vasos sanguíneos debajo de la piel, lo que produce los síntomas característicos.

Actualmente, no tiene cura esta enfermedad, porque no se conoce que la causa, pero los resultados con láser de Nd YAG, que es el aparato que se usa en LASER CARE, son muy buenos.  Dependiendo de cada caso, el paciente necesita una sesión semanal en las áreas afectadas.  La cantidad de sesiones quedan a discreción del Profesional, que va a indicar la cantidad de sesiones que se necesiten para disminuir este problema.  Desde la primera sesión, se disminuye la hinchazón, enrojecimiento, picazón y sensación de ardor.   Hay que esperar, luego de terminada la última sesión, dos meses para ver los resultados finales.  La enfermedad puede volver, por lo que, en un futuro, puede seguir empleando las sesiones de láser sin riesgos de efectos secundarios al cuerpo humano.   Siempre se le recomienda al paciente evitar el sol, situaciones de estrés, comer condimentos, evitar esfuerzos, calor, bañarse con agua caliente y cremas con esteroides.